Introducción
Esta
presente investigación es el resultado de un extenso análisis sobre una de las
catedrales más importantes de la Europa medieval, esto con el fin de destacar
los aspectos góticos más significativos dentro de la arquitectura de dicha
catedral. Es así que el interés por el arte gótico está presente en muchas
partes, incluso en nuestra actualidad, aunque está muy diferenciada de lo que
representaba en un mundo medieval. Es de mi atención retroceder en la historia
e indagar sobre una manera distinta de concebir el arte, con ello la arquitectura
como forma de expresión de esta. Voy a trabajar mis fuentes con el fin de
presentar un trabajo exacto. Por ello decidí enfocar mi investigación en varios
elementos, primero, definir qué es el gótico y cuál es su enfoque dentro del
mundo medieval; segundo, identificar y describir los elementos góticos que
emanan de la catedral mostrando énfasis en tres elementos: los arbotantes de
Nuestra Señora de París, los vitrales del Clautro y el rosetón mayor de la catedral.
Este
trabajo contará con cinco apartados en donde explicaré detenidamente cada uno
de los elementos a tratar. En el primero explicaré qué es el arte gótico y
cuáles son sus características principales, resaltando la influencia de este estilo
en la Europa medieval y en las catedrales. Para el segundo expondré el contexto
histórico de la catedral, cómo surge, cuál fue su importancia para la
religiosidad de la época, qué elementos góticos hay dentro de la estructura y el
por qué de los elementos, esto último relacionándolo con los propios
antecedentes de la construcción; aunado a esto explicaré de manera breve la
importancia no sólo artística y arquitectónica de la estructura, sino que
también mostraré el lado religioso que hay dentro de ella. Los elementos que he
decidido analizar tendrán su propio apartado, empezando con los arbotantes, los
cuales voy a definir, describir, analizar y explicar su función dentro de la
edificación. El siguiente estará enfocado en el vitral, aquí desarrollaré una
función descriptiva y explicativa, esto porque hay muchos elementos religiosos
de los que goza este componente, por ende, el apartado se guiará más por
entender un pensamiento medieval que a un sistema arquitectónico, sin ignorar
esto último. El apartado final presentará al rosetón, con este entenderé una
función de carácter arquitectónica y religiosa, ya que ambos conceptos son
importantes aquí. Esta investigación finalmente busca comprobar por qué dichos
elementos representan todo un paradigma artístico, que claro, nos ayudarán a
entender muchos planteamientos, fundamentalmente el contexto de una sociedad
que vivía en constante relación con los aspectos dogmáticos impregnados por el
cristianismo.
¿Qué
es el arte gótico?
Este
estilo artístico es muy interesante porque abarca más de tres siglos de
historia. La historiografía artística nos ha plasmado muchas maneras de
entenderlo, puesto que hay una diferencia en el estilo con el pasar de los años
hasta que finalmente vemos una concepción bien definida en la Baja Edad Media.
Es
preciso ubicarnos en el tiempo, ya que para el momento en que el estilo del
gótico estaría en su apogeo, el concepto del ‘gótico” todavía no existía. El
concepto ‘Gótico’ proviene del latín gothicus, aquello que pertenece o es
relativo a los godos, pero para denominar a un estilo artístico sería usado por
primera vez en 1550 por el historiador del arte Giorgio Vasari en su obra Le
vite de´ più eccelllenti pittori, scultori, e architettori italiani (Alegre,
2021). Giorgio Vasari hace una dura crítica al arte gótico, pues prácticamente reprocha
el oscuro arte del medievo y en su lugar vanagloria ese pasado ilustre de la
arquitectura clásica[1]. Aunque esto no sería una
idea única de Visari, sino que todos los humanistas florentinos expandieron
dicho pensamiento, el cual argumentaba que el verdadero y grandioso arte, el de
la antigüedad clásica, desapareció durante el medievo por causa de la “barbarie
gótica” (Luna, 2010). Estas perspectivas hicieron que todo el arte del medievo
tuviera las definiciones de gótico y bárbaro, cosa que empezaría a cambiar con
los historiadores del siglo XIX, quienes llegaron con una nueva interpretación
del pasado medieval, incluyendo las manifestaciones artísticas. El romanticismo
y el nacionalismo llegaron para valorizar el estudio de la Edad Media: Anne-Louise
Germaine Necke mencionó no creer en la existencia de un retroceso durante la
época medieval, todo lo contrario, esos diez siglos fueron grandes pasos para
la propagación de nuevos conocimientos y para el desarrollo de nuevas
facultades mentales (Rohde, 1919). El ejemplo claro de este movimiento fue en
Francia en donde los estudios de la arquitectura medieval, así como la
restauración de edificios góticos y la aparición de la arquitectura neogótica
se desarrollaron a partir de la década de 1830, y las tres vertientes tuvieron
a Viollet-le-Due como máximo representante” (Cócola, 2017). Este fue el
parteaguas para que los historiadores volvieran a enfocar su interés hacia un
estilo artístico que por muchos años fue objeto de comentarios despectivos.
Características
del arte gótico (arquitectura)
Encontramos
que a comparación de lo que creían los humanistas, el arte gótico es mucho más
complejo. Su estructura representa una gran innovación con nuevos sistemas de
construcción, nuevos conceptos, una religiosidad adherida y lo más
impresionante, un avance en la forma de los elementos que lo distinguen del arte
antiguo. He aquí algunas características de la arquitectura gótica que señala
la profesora Ana Antúnez (2021):
·
Consideración de la luz como
representación del teocentrismo, ya que identificamos a Dios con luz.
·
Búsqueda por ventanales más amplios para
multiplicar la cantidad de luz al interior, se aligera el muro y se
contrarrestan los empujes con contrafuertes y arcos arbotantes al exterior y
cerrando los ventanales con vitrales y rosetones que dejar pasar la luz.
·
Uso de bóvedas de crucería: es un sistema
de bóveda entrecruzadas, a su vez, atravesadas por arcos ojivales. Ayudaba a
distribuir el peso de la estructura hacia los pilares.
·
Vidrieras inspiradas en la Biblia que
logran un colorido y expresividad que supera al de las pinturas.
·
Consolidación entre el arte y la religión
que ya había puesto en marca el Románico, sirviendo tanto para transmitir el
mensaje de Dios e infundir el temor del hombre frente al poder divino, como
para materializar el poder de la iglesia.
Influencia
del gótico en la Europa medieval
Francia fue la cuna del gótico en la
segunda mitad del siglo XII. “El acto, la consagración de la iglesia de la
abadía de Saint-Denis, cerca de París, donde se enterraba a
los reyes de Francia. Todos los presentes, incluidos varios obispos y el propio
rey de Francia, Luis VII, quedan deslumbrados por la grandiosidad, la ligereza
y la luminosidad del templo, encargado por el abad Suger, en el que ha hecho
plasmar su nueva teología de la luz” (Cisa, 2020). A partir de este momento una
fiebre por la construcción de catedrales empezaría cimentarse. Otras naciones
empezaron a ser influidas por este estilo, tal es el caso de Inglaterra que desarrollaría
un estilo propio a finales del XII y mediados del XIII. Posteriormente otros
países descubrieron el gótico más tarde, por ejemplo, Portugal y España. Aunque
el primero esperó un siglo para ver su primera obra gótica con el estilo de Manuelin
del 1495 al 1521 (Pitarch, Andrés & Monfort, 2007).
Contexto histórico y
concepto estructural de la Catedral
Antes de enfocarnos en la historia de la
catedral, es necesario definir qué es una catedral. “Catedral” es un termino
que hace referencia a una materialidad arquitectónica bastante definida: designa
las diócesis eclesiásticas, la sede del obispo. Jacques Le Goff y Jean-Claude Schmitt
en su diccionario medieval nos dicen que “La catedral, visible desde lejos,
emblema de la ciudad, no es sino el corazón de un vasto conjunto de múltiples funciones:
centro religioso, intelectual, económico, de caridad, artístico… toda una
ciudad sagrada y simbólica dentro de la ciudad. Lugar en donde confluyen los
principales centros y núcleos de organización del espacio urbano y del
urbanismo (con su plaza), la catedral es también un centro de poder, objeto de
múltiples conflictos, en concreto entre el obispo y los canónigos” (2003). Esta
perspectiva nos deja clara que la relevancia de estas construcciones va más
allá de un ámbito religioso, pues también expresa un imaginario social sobre
las concepciones de vida, en ello como se va a relacionar el devenir del hombre
medieval con los propios dogmas. El ámbito artístico no será ignorado y mucho
menos para una sociedad que busca consagrar de distintas maneras su pensamiento
eclesiástico.
La catedral de Notre Dame se empezaría a construir en el año de 1163, en una época plena para la Edad
Media, por lo cual vemos un periodo de crecimiento económico gracias a los
avances agrícolas que están surgiendo y a las innovaciones tecnológicas que
logaron mejorar al sector de la ganadería. Tal y como lo explica Lara Martínez,
este período de grandes beneficios trajo consigo un excedente productivo y uno demográfico,
el cual el produjo un resurgimiento de las ciudades que empezaron a aparecer gracias
a la unión de burgos o barrios comerciales que eran los núcleos de los poderes
medievales: castillos o abadías (2019). La ciudad de París tuvo un ascenso muy
importante, convirtiéndola en una de las principales potencias urbanas de
Europa y en la primera capital verdadera de un reino occidental de la época
medieval, esto porque su gran potencial en términos económicos y comerciales era
inigualable. Esto mismo le permitió dar nacimiento a grandes vanguardias
artísticas, en este caso el ascenso del gótico de la mano de la escolástica,
por lo cual se volvió uno de los centros de cultura más importantes de la época
(Martínez, 2019). Ello nos explica el por qué de la necesidad de construir una
sede religiosa en dicha ciudad, pues como ya mencioné las catedrales eran
espacios de grandes aportes intelectuales.
El proyecto de Notre Dame fue promovido
por el obispo Maurice de Sully durante el reinado de Luis VII. Para la
construcción tuvo apoyo del rey y la participación económica de todas las
clases sociales de París, por lo cual no tuvo ninguna interrupción al momento en
que se construyó. La construcción estuvo inspirada por el ya mencionado modelo
de Saint Denis y su abadía. La profesora Imaginario nos muestra un poco de la
cronología (s.f.);
·
1182: la catedral comienza a prestar
servicios religiosos al concluir el área del coro.
·
1182-1200: se culmina la construcción de
la nave principal.
·
Inicios del siglo XIII: se construyen las
fachadas y las torres.
·
1250: Instalación de la primera aguja.
·
1250-1267: culminación del transepto
(trabajo de Jean de Chelles y Pierre de Montreuil).
·
1345: Se termina la construcción.
·
1400: instalación de la campana en la
torre sur.
Estructura
de la Catedral
A continuación, explicaré la composición
arquitectónica de la catedral e iniciaré explicando su planta, pues es de mucha
relevancia entender sobre que se cimentó tan asombrosa obra. La catedral tiene
una orientación de este a oeste en su eje longitudinal el cual le atraviesa uno
de carácter transversal dando así la forma de la llamada “planta de cruz
latina”, dicha cruz se ve mercada gracias a las cuatros naves laterales y a las
dos naves donde se encuentran las 37 capillas junto con sus deambulatorios
entorno a la parte de la cabecera; por otra parte, hay una mejor apreciación de
la cruz latina en la planta de la tribuna, ya que se desvanecen las naves laterales
quedando la doble altura de la nave principal con transepto y la galería que
está a su alrededor (Francisco, 2020). Durante su construcción se tuvieron que
crear muchas planeaciones para lograr un trabajo excepcional, cosa que Sully
hizo de buena de manera. La catedral tuvo al margen muchas cosas, entre ellas
sus dimensiones muy grandes, con sus 107 metros de largo y 5.500 metros
cuadrados de planta; estuvo rodeada del recinto canonical y el palacio; y, por
otro lado, se pliega a las exigencias de liturgia en la organización de los
diferentes espacios: se adoptó de un modelo de fachada con dos torres
campanario que estaba destinada a mejorar el recibimiento de los fieles (Le Goff
& Schmitt, 2003).
Existen otros elementos que caracterizan a
la catedral de Notre Dame. Tenemos la bóveda, que supuso un desarrollo distinto
de los pilares; dicha bóveda nos produce una imagen de unidad al interior y en
las naves laterales, las columnas que se utilizan para soportar las bóvedas
cuatripartitas son iguales en diseño, pero con un tamaño más reducido
(Francisco, 2020). Por otro lado, tenemos a la fachada principal, esta se
encuentra dividida en tres cuerpos horizontales, y de igual manera, de manera
vertical, los contrafuertes se encuentran rematados con torres, los cuales
cuentan con terraza en lugar de aguja; “la fachada principal de la catedral es
la occidental, en el primer cuerpo horizontal se encuentran tres pórticos,
separados por contrafuertes, cada uno cuenta con un tímpano donde se encuentran
representados motivos religioso, y arriba de los cuales se encuentra una
cornisa en la cual se encuentran pequeñas estatuas como representación de los
28 reyes de Judea” (Acevedo & Montero, 2020). En la fachada también
encontramos los tres principales tímpanos, tímpano de Santa Ana, tímpano del
juicio final y tímpano de Nuestra Señora, estos representan una imagen
teológica que forman de la concepción escolástica dentro de la arquitectura
gótica. Así mismo, la profesora Imaginario nos recalca sobre las otras fachadas
de la Catedral (s.f.): la
fachada norte con un pórtico que está enmarcado en un gablete, un tipo de
remate triangula y peraltado, que suele usarse para decorar los vanos y
ventanas de las iglesias góticas; la fachada sur en donde el pórtico está
dedicado a San Esteban y, al igual que todos los anteriores, está conformado
por tres registros, dichos registros son el superior, en donde puede verse a
Jesús junto a sus ángeles contemplando el martirio de San Esteban y el
inferior, relatando la vida y martirio de San Estaban. Hacia la parte externa
encontramos la aguja central que era calificada como un pararrayos espiritual,
que protegía a los fieles que se encontraban orando; los pináculos que con
forma piramidal coronaban los contrafuertes, además, cumplen una función
decorativa y de estructura; el arco ojival, formado por dos tramos de un arco
simétrico, el cual produce una mejor sensación de altura y verticalidad
(Villareal et al., 2022). Los aspectos ya mencionados forman parte del estilo
gótico que fundamentó a la catedral, los cuales como señalé traen consigo
aspectos religiosos que buscaban promover la enseñanza de un culto cristiano,
pero también todo un devenir arquitectónico que plasmó una perspectiva de mayor
ligereza, de mayor relevancia y de mayor gracia que en etapas anteriores.
Arbotantes
de Nuestra Señora de París
Para
continuar con los elementos de la catedral, hablaré de uno que representa un aspecto
sustancial en su estructura y que marca una de las esencias de la arquitectura
gótica. Se puede definir el arbotante como un arco de piedra que por tranquil o
rampante, es decir, que tiene los arranques a distintas alturas y que cumple
una función que depende de su posición en el conjunto, ya que es muy regular
encontrar variedad de hileras de arbotantes a diferentes alturas en algunas
catedrales (Orive, 2019). Así también, Antonio de Blas nos dice que su función
arquitectónica forma parte de el sistema de contrarresto que busca transmitir
el empuje a un estribo externo, de igual manera, estos al encontrarse arriba de
las bóvedas cumplen el objetivo de transmitir las cargar horizontales al machón
exterior; además, muchos de ellos traerán una acanaladura en la cara superior
por la que se conducen las aguas pluviales, que se evacuarán al exterior a
través de la gárgola (2019).
Fue
en Notre Dame donde se concibieron por primera vez los arbotantes en la arquitectura, resultado de las continuas investigaciones que buscaban una
mayor elevación y apertura de ventanales; estos arbotantes sirven para dirigir
los empujes desde las bóvedas hasta los contrafuertes exteriores, esto permite
la apertura de grandes vanos, que ocupan una gran parte del espacio del muro;
su utilización marcó una nueva etapa en la arquitectura gótica (tasararte, 2019).
El historiador de la arquitectura Auguste Choisy, afirma que: “progreso
señalado por le época gótica consistirá sobre todo en resolver de manera
metódica y definitiva, el doble problema de aparejo de las bóvedas por
penetraciones y su equilibrio. La arquitectura gótica zanjará las dificultades
del aparejo mediante el empleo de las bóvedas nervadas y las cuestiones
referentes al equilibro gracias a la introducción del arbotante” (Machado, 2022).
De igual manera, Antonio Machado nos dice que para Choisy “la historia de la
construcción gótica será la de nervadura y del arbotante”, haciendo alusión a una
evolución dentro de la técnica que ocasionaron el cimiento de estos componentes
(2022). Otro aspecto bastante curioso que nos cuenta el catedrático Juan Diego Caballero
es que, dentro de un punto de vista simbólico, el afán por incrementar la
altura de los edificios se debe un carácter religioso, tratar de acercarse a
ese cielo en el que habitaba Dios y buscar esa luz que venia a identificarse con
la propia divinidad; incluso esta misma simbología estaba dentro de las
gárgolas con las que estaban rematadas, pues representaban figuras, tanto
reales como imaginarias. Con esto podemos definir que la Catedral de Notre Dame
marcó un progreso dentro de este estilo arquitectónico, formando una propia
concepción del gótico, pues utilizaría elementos que la diferenciaría de otros
monumentos y que, a su vez, lograría marcar una influencia en otras
construcciones que estaría llegando a la Europa medieval, por ejemplo, las
catedrales de Amiens, Narbona y Clermont Ferrrand.
Vitrales del Claustro de Notre-Dame
La
técnica del vitral es una de las más conocidas del mundo, esto por su gran
valor artístico y también simbólico, según la época. En palabras de Mario José
“el vitral es en términos generales un bastidor con vidrios ensamblados por
medio de cañuelas de plomo o latón soldados, que se emplea para cerrar espacios
en puertas y 26 ventanas, dichos vidrios pueden formar motivos ornamentales o
abstractos, donde destaca la iluminación dada por su claridad y transparencia”
(2004). Algo que llama mucho la atención, son los simbolismos que están
impregnados de una manera pedagógica, ya que según las químicas Ana Martínez y
Tessy López, su capacidad para contar historias lo coloca como un elemento
sustancial para el desarrollo cultura del ser humano; crea un misticismo único,
porque la narración regularmente no es transparente (Jirado, 2004). Por otra
parte, las catedrales góticas forman parte de una de las integraciones plásticas
más exitosas, diría Rufino Tamayo: ''allí hay integración no sólo de las artes
plásticas sino de la mayoría de las actividades del hombre. La arquitectura
gótica es vertical. La escultura, la pintura que completan las líneas
arquitectónicas supeditándose a ellas, no sólo alteran este sentido de elevación,
sino que lo acentúan y matizan. Los vitrales, que son la forma con una técnica
peculiar como se manifiesta la pintura integrada a la catedral gótica, no son
[decorados agradables] sino que forman parte de la catedral. Todo concurre a un
mismo fin" (Tibol, 1987).
Con
la llegada de estilo, las catedrales se impregnaron con una gran luminosidad,
algo muy importante, pues para el pensamiento medieval la luz es la imagen
sensible de lo sagrado, noción que tiene su origen en varios libros del Nuevo
Testamente, en los cuales cristo se llama así mismo como “la luz del mundo”, y
se nombre a Dios como el “Padre de las luces” (Tomasini, s.f.). Es por ello que
vemos este elemento en toda Notre Dame, siendo de utilidad para iluminar las
grandes naves de iglesia que permiten otorgar una tonalidad muy especial la
cual logra resaltar muchos espacios y figuras dentro del propio vitral. Ahora
bien, los vitrales del claustro tienen muchos significados, expondré dos: el
vitral 001 nos muestra a Santa Genoveva que acaba de nacer en
Nanterre cerca de París en el 423, y que está acostada cerca de su madre
galo-romana y de su padre franco, también a los lados aparecen San Germain
d’Auxerre y los ángeles que cantan las alabanzas santas; cuenta con una
inscripción latina al pie del vitral que dice “Feliz esta Genoveva de su
llegada este mundo. Lo que en espíritu anticipa Germain se revelará después la
realidad” (Odisea, 2008). Por otro lado, el vitral 012 que representa
la potencia espiritual de Genoveva que le permite mandar sobre los elementos;
nos narra que en la década del 470 d.C., París padece de una penuria
alimenticia y no tiene trigo para subsistir, Genoveva en su rol como protectora
de su pueblo organiza una expedición para buscar cereales a Arcis-sur-Aube,
pero debido al mal estado de los caminos escoge la vía fluvial remontando el
Sena con barcas y bateleros, en el trayecto un árbol inclinado sobre el río
vuelve la navegación muy peligrosa, Genoveva ordena al árbol abatirse y de este
salen dos demonios hediondos, el árbol es arrastrado por el cause; se cuenta
una leyenda de que a partir de ese momento ningún sufragio se ha suscitado en
ese punto (Sánchez, 2015). Como pudimos observar, los vitrales muestran
perspectivas que van más allá de lo decorativo, sino que también nos revelan de
promoción de los dogmas del cristianismo: el uso de la luz como elemento
religioso y las historias dentro de los vitrales que narran situaciones religiosas,
esto con el fin de dar a conocer a los creyentes historias que únicamente se
encontraban en los libros.
El Rosetón Mayor de la Catedral
Para
finalizar este trabajo, hablaré de otro aspecto que ha sido muy poco valorado
al momento de analizar la estructura, pero trae consigo una excepcional carga
artística y arquitectónica. El rosetón concentra su importancia en la parte
superior del frontispicio y se trata de un círculo perfecto que está formado
por tres arquivoltas concéntricas fuertemente abocinadas, también en la zona de
su núcleo se coloca una vidriera con forma de disco rodeada por un molde
adornado con campánulas (Lozano, 2005). En cuanto a lo gótico, el rosetón
expresa en su centro el estado de conciencia humana más primitivo, y su anillo
más externo el estado de conciencia mas elevado, recreando un trayecto de uno a
otro por sucesivos estados intermedios (Musso, 2014). El rosetón mayor nos expresa todo un dilema dogmático. En ello, idea de la circularidad está
asociada a Dios, porque al círculo es la figura geométrica de la perfección,
por ende, se manifiesta a través del círculo la perfección divina; asimismo, el
rosetón alude a la Virgen María, esto lo vemos en la forma de la rosa, que es
un emblema bastante característico no solo en Notre Dame, sino también en otras
catedrales que acogen un culto mariano (Estradé. 2019). De igual manera, se nos
expresa que este rosetón con su representación de carácter mandálico,
constituye una imagen arquetípica que muestra la complejidad y la belleza del
camino que conduce al proceso de madurez psíquica, esto reforzándolo con los
ideales cristianos de llegar a una eternidad divina, pensamiento clásico del
cristianismo (Musso, 2014). El rosetón nos refleja de muy buena manera el
estilo de lo vitrales gótico, el arte de estas sustituyo al de las pinturas
murales, debido a que los muros desaparecieron en favor de la luz; otra
característica es que usa vitrales coloreados con rojos oscuros e intensos
azules para crear una atmosfera oscurantista y de misterio (Universidad
Complutense de Madrid, s.f.). A todo esto, podemos decir que el rosetón de
Notre Dame cumple no solo una función arquitectónica, sino también una
artística que está rodeada de elementos religiosos, y que son representados
tanto en forma de alegorías como de manera literal, ya que presenciamos un
planteamiento del significado de las formas que viene acompañado de una
decoración vitral, los cuales como ya expliqué en el apartado anterior, no son
más que una manera de representar la religiosidad de la época mediante el uso
de imágenes.
Conclusiones
Descubrimos
que el arte gótico es todo un paradigma artístico que va más allá de lo que
dicen lo humanistas, vemos una complejidad rodeada de fundamentos religiosos,
los cuales se ven manifestados a través de estos grandes monumentos. Pero esto
no es todo, pudimos encontrar que la catedral gótica es también en lugar para
transmitir ideas mediante las imágenes: “la catedral gótica, ha dicho Reinach,
es una verdadera enciclopedia del saber humano. En ella se encuentran
representaciones tomadas de libros santos y de las leyendas piadosas; motivos del
reino animal y vegetal; símbolos de las estaciones, de los trabajos agrícolas,
de las artes, de las ciencias y de los oficios; finalmente, alegorías morales,
como las ingeniosas personificaciones de las virtudes y los vicios” (Acevedo,
2011). Francia al ser el lugar de nacimiento de este estilo artístico, sería el
primero en desarrollar los elementos básicos que debían tener las
construcciones góticas. Es decir, Notre Dame marcó un hito en la historia del
arte que ninguna otra construcción ha podido conseguir, tan así que, hoy en
día, la catedral es uno de los elementos característicos de la Francia actual,
sin mencionar que su incendio conmocionó al mundo entero. No obstante, el
significado que la catedral tuvo en un mundo medieval fue resultado de una gran
variedad de concepciones sociales y religiosas que la rodearon, y que
estuvieron presentes en toda su historia, dichas ideas están presentes en los
rigurosos elementos góticos que fueron imitados en los demás países europeos:
una catedral que cambió para siempre la historia del arte y la arquitectura.
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Universidad Complutense de Madrid (s.f.). Rosetón norte de la catedral Notre Dame. España.
[1]
Así se
refiere Vasari al arte de la Edad Media: “Este orden [el gótico] ha sido
abandonado por nuestros buenos artistas por considerarlo monstruoso, bárbaro y
sin ninguna armonía, y en vez de orden debería llamarse confusión y desorden.
[…] Este estilo fue inventado por los godos” (Vasari, Le vite […], 1550,
Capítulo III).